22 de agosto de 2017
Artesanía de etiqueta...
Artesanía de etiqueta...
Para conquistar el paladar primero hay que conquistar la vista, y con esta máxima comenzamos una publicación que nos hace especial ilusión, en la cual ponemos nuestra atención en nuestras Cremas Premier Heritage.
En el mundo gastronómico, lo natural es tendencia...
El secreto de lo auténtico se manifiesta en estas cremas, fruto de la laboriosidad y la sabiduría de unas tierras que han unido lo mejor de si mismas.
Mezclar dos culturas distantes, el ancestral mediterráneo a traves de nuestras cremas de Jijona, Piedra ó nuestras cremas de doble tueste como la Avellana, almendra o Nuez. Compartiendo protagonismo con la transhumáncia en las tierras del noroeste zamorano, Los Arribes del Duero, que salpicado de encinares, robledales adehesados y campos de cultivo, se transforma en bancales junto al río Duero y sus cañones. Creando un entorno idílico a los rebaños de crianza extensiva obteniendo a traves de ellos, la mejor leche de cabra...
Y es allí en el centro de los Arribes del Duero, en un silencioso taller artesano, donde el aroma a la crema de queso nutre la vida diaria.
Lo desconocido puede dar como resultado algo muy bueno; la experimentación en la cocina, la conexión entre lugares dispares donde la calidad prevalece.
Dos tierras diferenciadas por el clima, dos manufacturas térreas.
Versión exclusiva de la cocina de dos terruños particulares de la geografía española.
"CREMAS PREMIER HERITAGE"
Empezar a hablar de esta crema que sin llenar el texto de signos de exclamación es no hacerle justicia.
Sencillos tarros de cristal que esconden irresistibles obras de arte que ilustran recetas con siglos de tradicion y una sugerente presentación que aporta ese algo más que tanto buscamos todos.
Diseccionamos el tarro por capas superpuestas, donde nada más sentir el especial "pop" de la pérdida de vacío, una untuosa capa de crema de delicioso turrón de Jijona o Piedra, quizás turrón de yema o almendra tostada, avellana o nuez, precede...
Nadie que haya probado nuestras cremas exagera, una excepcional materia prima, tiempo y paciencia y el conocimiento acumulado en el tanteo de los tiempos han hecho de nuestras cremas un regalo convertido en sabiduría, en elegancia, en disfrute tanto para uno como para ser regalado o compartido.
Bajo la primera capa vislumbramos una segunda capa, nívea, cremosa y con un toque ácido. Es la crema de queso de cabra. ¡¡Impresionante!!
La armonía es el objetivo primordial que rige la elaboración.
Nuevas notas aromáticas surgen de la mezcla del queso con el penetrante aroma del turrón en sus diferentes versiones.
Nos disponemos a probarla, una cucharada primero y esta soberbia mezcla cargada de matices, nos muestra su caracter único.
Disfrutamos del sabor de siempre, pero mezclado, fusionado. Convertido en una eficaz materia prima que nutre los recuerdos, nos encanta ligarnos a las personas, al lugar y a las tradiciones del paladar.
Salta en la memoria de todos los entendidos, los mejores momentos, aquellos en los que exageradamente, fuimos felices.
Definitivamente la unión de los sentidos crea la mágia.
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